Con la finalidad de hackear el protocolo de seguridad de un sistema informático van en aumento los sabotajes, espionajes y accesos o intercepciones no autorizados, creciendo a la par con los contextos de transferencia de información de la industria 4.0, como: computación en la nube, IOT, IA, big data, realidad aumentada y virtual, Robótica, Automatización y transformación digital empresarial; que si bien, han contribuido como catalizador en la transformación social, también han posicionado a la “sociedad del conocimiento” en un punto de riesgo, por los ataques que son objetos los mecanismos que se emplean para producir, guardar y compartir información.
Situación, que mantiene la misma proporción de aplicación, con la adopción de la industria 5.0 y la “sociedad inteligente”, que promueven la colaboración “humano-digital” sobre estructuras automatizadas y programadas; que exigen más allá, de fortalecer las estrategias de seguridad, un marco jurídico más pertinente para la administración de justicia sobre los delitos informáticos y un cambio de conducta social, conscientes que cualquier intento de supervisión automatizada no será suficiente ante la malas prácticas de las personas en el uso y manejo de la tecnología.
Carolina Ortega
Impulsora de la simbiosis entre el Derecho y las TIC´s
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